Los devotos no aspiran a la riqueza material.
Un devoto no codicia los placeres materiales, aunque estén a su alcance por un simple deseo. Por la gracia del Señor, un devoto puede obtener maravillosos éxitos materiales deseándolos, pero un verdadero devoto no hace alarde de ello. El Señor Caitanya Mahaprabhu ha enseñado que no hay que buscar la opulencia material ni la fama material, ni tampoco disfrutar de la belleza material; simplemente hay que aspirar a dedicarse al servicio devocional del Señor, aunque no se obtenga la liberación y haya que continuar incesantemente el proceso de nacimientos y muertes. Un devoto puro nunca espera nada del Señor. Ni siquiera busca la liberación, y mucho menos los bienes materiales. En general, la gente desea dharma, artha, kama y moksa, en ese orden. En primer lugar, la gente quiere ser religiosa (dharma) para alcanzar la riqueza material (artha). La gente quiere riqueza material para satisfacer sus sentidos (kama), y cuando no consiguen satisfacer sus sentidos, buscan la liberación (moksa). Así, dharma, artha, kama y moksa continúan. Sin embargo, un devoto no está interesado en ninguno de ellos. En la religión cristiana, la gente reza: «Danos hoy nuestro pan de cada día», pero un bhakta puro ni siquiera pide su pan de cada día. Un devoto puro se mantiene en la mano de Krishna como una joya preciosa. Cuando tienes algo precioso en la mano, lo cuidas mucho; del mismo modo, Krishna cuida del devoto y lo protege.
El Srimad-Bhagavatam también confirma (2.3.10) que, aunque una persona desee el disfrute material o la liberación, debe dedicarse al servicio devocional. Aquellos que tienen la ambición de obtener beneficios materiales del servicio devocional no son devotos puros, pero debido a que se dedican al servicio devocional, se consideran afortunados. No se dan cuenta de que el resultado del servicio devocional no es la bendición material, pero al dedicarse al servicio devocional del Señor, llegan a comprender que el disfrute material no es la meta del servicio devocional. Krishna mismo dice que las personas que desean un beneficio material a cambio del servicio devocional son ciertamente necias, porque desean algo que será perjudicial para ellas. El verdadero objetivo del servicio devocional es el amor a Dios. Aunque una persona pueda desear beneficios materiales de Krishna, el Señor, que es todopoderoso, considera la posición de la persona y gradualmente la libera de una vida materialmente ambiciosa, comprometiéndola más en el servicio devocional. Cuando una persona está verdaderamente comprometida con el servicio devocional, olvida sus ambiciones y deseos materiales.
Fuente: A.C. Bhaktivedanta Swami Prabhupada (edición de 2012), «Enseñanzas del Señor Caitanya, El Avatar Dorado», página 129.
A.C. Bhaktivedanta Swami Prabhupada (edición de 2007), «Teachings of Lord Kapila, The Son of Devahuti», página 222
